Calidad y resistencia
Conseguir un flujo centrado y dosificado de masa fundida es esencial para la calidad del producto final. Y esto es lo que conseguimos con nuestras boquillas de molibdeno y tungsteno resistentes a altas temperaturas. Con adiciones de iridio y renio, su vida útil es particularmente elevada, así como su resistencia al desgaste y a la corrosión. Además, hemos desarrollado una técnica de unión para unir metales nobles en boquillas de metales refractarios, alargando así su vida útil al máximo.