Las prensas de extrusión se utilizan para conformar metales no férricos, tales como latón, cobre-níquel y aluminio-bronce, así como acero inoxidable, en barras, alambres o tubos. La pieza bruta de metal se calienta a su temperatura de conformación y se aprieta luego a través de la matriz con la ayuda de un pistón. De esta manera se confiere la forma externa del metal.
Las matrices de extrusión están sujetas a elevadas presiones mecánicas. Durante el proceso de trabajo, se genera un alto nivel de calor de fricción entre la matriz y la pieza. Añadiendo pequeñas cantidades de carburo de hafnio reforzamos nuestro molibdeno para conseguir una larga vida útil dentro de su prensa de extrusión.
Óptima estabilidad de forma y dimensional
Menor tendencia al agrietamiento con perfiles de prensado
Alta estabilidad térmica
Buena ductilidad en caliente
Baja capacidad de calor
Alta conductividad térmica
Puede descargar las especificaciones del producto aquí:
El molibdeno-carburo de hafnio (MHC) es altamente resistente al calor, tiene un alto nivel de conductividad térmica y un bajo coeficiente de expansión. El MHC conserva su forma incluso con temperaturas operativas de hasta 1550 °C. A temperaturas de hasta 800 °C, el MHC es apropiado en el uso en insertos para matrices. A temperaturas más altas recomendamos utilizar el MHC para matrices completas.
Suministramos nuestras matrices de MHC en forma de disco con o sin perforación inicial.
Perforación:
Torneado:
Rectificado
Electroerosión:
Si tiene cualquier duda sobre el tratamiento de nuestros materiales, estaremos encantados de asesorarle.
Antes del primer procedimiento de extrusión, caliente la matriz a 350 °C como mínimo. La temperatura no debería descender por debajo de 250 °C durante los intervalos entre las operaciones de prensado. Después del uso, deje enfriar la matriz hasta que alcance la temperatura ambiente, teniendo en cuenta que el MHC no se debería enfriar con agua.
A pesar del bajo coeficiente de expansión térmica, la contracción de los insertos de MHC de 5,6 · 10-6 m/m · K se puede controlar fácilmente. Mediante un retacado en varios puntos se impide que el inserto sea extraído de su soporte. Durante el primer procedimiento de extrusión, la matriz se puede contraer entre 0,1 y 0,15 mm en la zona de la superficie de deslizamiento que confiere su forma a la pieza. Este efecto vuelve a desaparecer al realizar una corrección apropiada durante los siguientes procesos de prensado. Después de la corrección, la matriz mantiene su estabilidad de forma y dimensional.
Ocasionalmente se pueden formar grietas capilares en los radios de entrada. Estas no perjudican la función de la pieza. Solo se necesita repasar la matriz si el material prensado se adhiere a las grietas capilares. Para este fin recomendamos efectuar un pulido manual con un paño suave de lino y pasta abrasiva diamantada.