El moldeo por inyección de plástico es un proceso que se utiliza para la fabricación de productos de plástico. El plástico líquido se transporta mediante un canal caliente y se inyecta en moldes a través de una boquilla de canal caliente. El material de nuestras puntas de boquilla ha sido optimizado específicamente para este proceso.
Conductividad térmica de hasta 140W/mK
Altamente resistente a la corrosión y las altas temperaturas
Larga Vida útil gracias al endurecimiento de la superficie
Buen mecanizado
Puede descargar las especificaciones del producto aquí:
Muchos plásticos requieren un rango de temperatura de tratamiento extremadamente preciso. Si la temperatura es demasiado alta, el material puede sufrir daños. Si la temperatura desciende con demasiada rapidez, el plástico se endurece y ya no entra de forma perfecta en el molde. Por este motivo, la transferencia térmica en la boquilla de canal caliente es esencial.
Para mantener el plástico a la temperatura correcta, la boquilla se calienta desde el exterior por medio de filamentos calentadores. Solo en la punta de boquilla se deja de utilizar un equipo de calefacción. La misma boquilla calentada debe transferir el calor al plástico.
La conductividad térmica del material es crucial. En metales convencionales, como por ejemplo el acero, no es suficiente. El cobre tiene un nivel de conductividad térmica muy elevado, pero no resiste el plástico abrasivo ni las cargas mecánicas.
Por ello, hemos desarrollado la aleación TZM (titanio-circonio-molibdeno). La TZM ofrece una conductividad térmica particularmente alta de 140 W/mK , junto con una excelente resistencia al calor y a la corrosión. Si se requiere una dureza especialmente elevada del material, podemos añadir dureza a la TZM sometiéndola después del mecanizado a nuestro proceso SHN. La TZM es más fácil de mecanizar que los metales duros (carburos de tungsteno).
Los plásticos reforzados con fibra de vidrio son un reto especialmente duro, ya que se le aplica a las herramientas una elevada carga abrasiva. Durante el proceso de producción pueden ejercer un desgaste considerable en los sistemas de canal caliente, y particularmente en las boquillas de canal caliente. Se requiere una combinación óptima de conductividad térmica y dureza del material. Por este motivo, hemos desarrollado un método que otorga a nuestras puntas de boquilla de TZM una resistencia extraordinaria a las agresiones: el proceso de endurecimiento superficial SHN.
Por medio del proceso SHN , podemos reforzar las superficies y los componentes completos de la TZM, añadiendo una capa de difusión firmemente adherida. En consecuencia, nuestros clientes obtienen una superficie resistente al desgaste, a la par que un buen mecanizado del material. El endurecimiento de la superficie tiene lugar durante la fase gaseosa. Los recubrimientos que producimos con el proceso SHN se adhieren mejor que las capas de PVD o CVD convencionales. Reproducen a la perfección el contorno de superficie del producto de la TZM.
Micrografía de una boquilla de canal caliente endurecida con SHN