Llevamos más de 100 años trabajando con los metales refractarios molibdeno, tungsteno, tántalo y con compuestos a base de tungsteno (W-MMC). Mecanizar estos metales requiere conocimientos especializados. Gracias a nuestra experiencia de muchos años trabajando con dichos metales, somos capaces de desarrollar los productos más sofisticados.
Los metales refractarios son valiosos por sus cualidades especiales: elevado punto de fusión, excelente resistencia mecánica, una buena conductividad eléctrica y una magnífica resistencia a la corrosión. Todas estas cualidades los convierten en los materiales perfectos para las aplicaciones industriales más exigentes en varios sectores, como la industria de semiconductores, la electrónica de potencia, la movilidad eléctrica y la industria energética.
Obtenga más información sobre las cualidades y el origen de nuestros materiales. Estaremos encantados de ayudarle a elegir materiales para la aplicación que necesite.
En las páginas de los materiales encontrará más información sobre las cualidades, los ámbitos de aplicación y la gama de productos de cada uno. También puede consultar la ficha técnica del producto, donde se incluye información detallada de cada material.
Refinamos metales refractarios con aditivos metálicos y cerámicos para crear aleaciones. Así, adaptamos de forma específica las cualidades de los metales y los optimizamos según las aplicaciones concretas de cada cliente. Aleaciones como TZM, ML o WVM tienen una mayor resistencia a la fluencia y una temperatura de recristalización más elevada que los metales puros correspondientes, por lo que suponen una importante ventaja en aplicaciones a altas temperaturas.
Para satisfacer las exigencias de nuestros clientes, simulamos el comportamiento de los materiales durante la producción y al aplicarlos. Estudiamos los procesos mecánicos, físicos y químicos y validamos los resultados mediante pruebas que coordinamos con nuestros clientes.
Así, hacemos que sean posibles nuevas aplicaciones de alta tecnología para nuestros clientes con soluciones personalizadas.
¿Requiere algún material especial? Estaremos encantados de asesorarle al respecto o desarrollar con usted la composición de material adecuada para la aplicación que necesita.
Hable con nosotros, estaremos encantados de atenderle.
Obtenemos nuestro polvo de metal exclusivamente de fuentes éticas, sociales y ecológicas.
Con la certificación de Responsible Minerals Initiative (RMI) (Iniciativa de minerales responsables), garantizamos que el tungsteno y el tántalo proceden en su totalidad de regiones sin conflictos. Además, nuestro suministro de materias primas es seguro gracias a nuestra participación en minas occidentales.
Los materiales de alto rendimiento son aquellos que se emplean en las aplicaciones más exigentes de los diferentes sectores industriales gracias a sus cualidades físicas y químicas especiales. Se caracterizan por un elevado punto de fusión y una gran resistencia frente a la radiación y la corrosión, además de ser estupendos conductores de la electricidad.
Los metales refractarios son especialmente resistentes al calor gracias a su punto de fusión tan elevado. Se dilatan muy poco a altas temperaturas y son muy resistentes. Los metales refractarios son muy resistentes frente a la corrosión y cuentan con una muy buena conductividad eléctrica y térmica. También sirven para proteger contra los rayos X y la radiación gamma.
Los metales refractarios se utilizan ampliamente en varias aplicaciones técnicas, como la tecnología médica, la industria aeroespacial, la electrónica y muchos otros ámbitos donde se requieren buen rendimiento y eficacia. Debido a sus propiedades físicas especiales, como su elevado punto de fusión, se utilizan como pieza térmica en hornos de alta temperatura, como electrodos de fundición de vidrio o como contacto de conmutación para la transmisión de energía.
Las aleaciones se crean combinando dos o más elementos, siendo un metal al menos uno de ellos. Así se pueden modificar las cualidades de forma selectiva y optimizarlas para aplicaciones concretas. En comparación con los metales puros, las aleaciones pueden ser más resistentes, mecanizarse más fácilmente o tener una mejor resistencia a la corrosión.
Los subproductos de la producción, al igual que los productos desgastados y la chatarra derivada de los metales refractarios molibdeno y tungsteno, se reciclan mediante procesos químicos y termomecánicos. Las aleaciones y otros materiales como el cobalto, el níquel o el tántalo también pueden reciclarse.